
Biografía
Hadher Lozada es un artista, pintor colombiano, que nació en la ciudad de Ibagué y estudió en Bogotá. Su obra se enfoca en la relación entre ornamento y naturaleza, y abarca pintura, instalación, literatura y arquitectura. Sus obras aluden a la condición humana que dan cuenta de un trasfondo social; con proyectos como Horizonte Paralelo, una serie de pinturas que exploran las dos realidades de las riberas del mar, haciendo un acercamiento al cambio climático y las catástrofes ambientales; Las tres edades de la mujer, un conjunto de tres obras de gran formato que representan diferentes etapas de la vida femenina; Humana Objects / Humano no-humano, una compilación en capítulos de obras desde distintas técnicas que cuestiona la relación del ser humano y los objetos que lo rodean; o Tótem Urbano, una obra que combina pintura y escultura para crear una estructura monumental que evoca la cultura precolombina. Su proyecto de grado, Del Centro a la periferia a través de los bordes de una manzana patrimonial, una investigación y propuesta arquitectónica sobre el patrimonio urbano de Villa de Leyva, fue presentada en la Bienal de Arquitectura Archiprix Addis Ababa 2021. En el año 2024 recibe el premio I Muestra Tolimense de Arte Contemporáneo, organizado por el Museo de Arte del Tolima y la Gobernación del Tolima con el jurado y curador Jaime Cerón Silva, por la obra 3750 Milímetros de Extensión / Extinción.
Statement
La construcción de una imagen
Desde la pintura y la instalación, el proceso de investigación realizado por el artista Hadher Lozada, hacia las similitudes existentes entre ornamento y naturaleza, aborda la condición humana por medio de la anatomía del cuerpo, las estructuras sociales y los cambios ambientales. La construcción de una imagen determina los procesos mentales y de análisis de la información sensitiva para la comprensión del mundo: “no comprendo al mundo sin lo que aprendo de él y sin las fuentes de donde adquiero esa idea que tengo del mundo”. El diálogo del cuerpo y su contenedor reaniman la sensibilidad del espacio como elemento compositivo sumándose al lenguaje geométrico del conjunto; el cuerpo y su espacio habitable, sus necesidades psíquicas, sus posibilidades físicas y su comportamiento social inmerso en las dinámicas del espacio vacío y la violencia de una vertical.
Muchas de las imágenes logradas son el resultado de una constante en el interés por la simbiosis de cuerpo y entorno, al indagar entre los contrastes y las contradicciones de formas y significados, haciendo modificaciones u omisiones de la realidad y recalcando la importancia que tienen los límites en la comprensión del espacio, o en la indagación de los cambios en la atmosfera (de un espacio habitable) al intervenir con objetos y al modificar su entorno. Pintando rocas o cabezas, trabajando con luz o aceite, dibujando personajes al interior de una lata de sardinas o en grandes paneles, recordando cráneos de gorilas o árboles o flores o bañistas en playas soleadas; cada elemento trabaja composición, atmosfera, color o lo que es lo mismo: luz.